Nuestro municipio carecía de un espacio adecuado para que padres y madres al cuidado de sus bebés pudieran atender sus necesidades fuera de sus domicilios. Con esta iniciativa, ahora hecha realidad, cumplimos un compromiso con la ciudadanía y damos respuesta a una demanda social. Nos gusta que los vecinos puedan seguir adelante con sus tareas cotidianas, como acudir a dependencias municipales a realizar trámites administrativos, y que no sea ningún obstáculo para ello el cuidado de sus bebés y sus necesidades de alimento, por eso ponemos a su alcance un lugar limpio, íntimo y cómodo, y con todo lo necesario para atender todas las necesidades de madres lactantes o de los bebés.
Es un paso firme hacía la igualdad real. Una apuesta decidida por la conciliación de vida familiar y del trabajo que nos va a permitir alcanzar esa igualdad verdadera, la que ayuda y es útil, no la que consiste en propaganda y anuncios. De la igualdad de escaparate ya tenemos bastante, queremos hechos y acciones.